¿Qué es una bomba centrífuga y cómo está presente en nuestro día a día?
Nuestro día a día depende de máquinas en las que no reparamos, pequeños ingenios sin los cuales sería imposible la vida tal y como la conocemos. La bomba centrífuga es una de esas máquinas, una que tiene una importancia vital.
Esta clase de mecanismo mueve fluidos como el agua, por lo que participa en los sistemas de distribución de agua, llevándola hasta los grifos de nuestras viviendas.
¿Qué es una bomba centrífuga?
Es un dispositivo mecánico que se emplea con el fin de trasladar fluidos a través de la fuerza centrífuga, que es la que le da nombre.
Dentro de la carcasa tienen un impulsor giratorio. Éste se mueve y va incrementando la velocidad del líquido, lo cual lo impulsa hacia la periferia de la bomba. Así, se genera un flujo constante, por lo que esta es una de las clases de bombas más comunes en los hogares y en las industrias.
Se diferencia de otras bombas centrífugas porque tiene un diseño muy sencillo, basándose su funcionamiento en el principio físico de la fuerza centrífuga. Por eso, los líquidos son transportados con un desgaste mínimo de la bomba.
¿Cómo funciona?
El líquido pasa por la válvula de entrada y va al centro de la bomba, en donde el impulsor está girando a gran velocidad. Por la fuerza centrífuga, lo lanza hacia afuera, camino de la válvula de salida.
Gracias al movimiento se genera una presión que consigue impulsar el líquido a través de los sistemas de tuberías. Dicho de otro modo, la energía mecánica de la bomba se transforma en energía hidráulica.
Hablamos de un dispositivo que es muy útil cuando se necesita mover grandes volúmenes de agua de una forma sencilla, puesto que el diseño de la bomba no puede ser más simple.
¿Qué aplicaciones tiene esta bomba en la vida cotidiana?
La bomba centrífuga es muy versátil y por eso posee tantos usos en la vida cotidiana, pese a que suele ser desconocida para el gran público.
No es raro verla dentro de edificios y comunidades, en los sótanos por donde entra el agua potable. Cuando los edificios son muy grandes, la presión del agua que viene de la calle no es suficiente y hay que incrementarla con una de estas bombas. Con ellas, se consigue que todas las viviendas tengan agua a la presión adecuada.
Siguiendo con el agua, hacen una labor excelente en el tratamiento de aguas residuales dentro de las depuradoras de las ciudades.
Igualmente, es una apuesta segura en los pequeños jardines, en donde las bombas centrífugas llevan el agua desde los pozos o los depósitos hasta las mangueras.
Las calefacciones se benefician de la simplicidad de la bomba centrífuga, pues gracias a ella se genera una circulación de agua constante, algo que también es necesario en las piscinas (y en donde se instalan bombas de esta clase).
Con los grandes sistemas de climatización se usan a menudo, garantizando que el movimiento de los líquidos refrigerantes no se detiene. Así, las instalaciones siempre se mantienen a la temperatura más adecuada.
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