El paro registrado se sitúa en 2.707.456 personas, el mejor diciembre desde 2007

03/01/2024

Miguel Ángel Valero. El desempleo juvenil cae el 5,83%, con 12.014 parados menos. El número total de jóvenes parados es el menor de la serie histórica.

El número de personas desempleadas registradas en las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), al finalizar el mes de diciembre de 2023 ha descendido en 27.375 (-1%) respecto al mes anterior.

En términos interanuales, el paro ha bajado en 130.197 personas (-4,59%). 2023 ha sido, por tanto, un año muy positivo en términos de empleo pese a la incertidumbre de la coyuntura internacional.

El paro registrado se ha situado en 2.707.456 personas, la cifra más baja para este mes desde 2007, antes del estallido de la crisis financiera.

El paro en términos desestacionalizados baja en 6.562 personas.

Respecto a noviembre de 2023, el paro registrado desciende en los sectores de Servicios, en 25.158 personas (-1,28%); en Agricultura, en 1.965 personas (-1,97%), y entre el colectivo Sin Empleo Anterior, en 7.018 personas (-2,80%).. Pero aumenta en la Construcción, con 5.285 parados más (2,53%) y en la Industria, donde se registran 1.481 personas más (0,69%).

La caída del desempleo en diciembre beneficia especialmente a las mujeres, ya que el paro cae en 28.120 personas (-1,71%) ese mes, hasta situar el total en 1.616.973. El paro masculino aumenta ligeramente en 745 (0,07%) hasta un total de 1.090.483 al ascender en 745 (0,07%). Si lo comparamos con diciembre de 2022, el paro femenino cae en 73.175 (-4,33%) y el masculino baja en 57.022 (-4,97%).

El desempleo de los jóvenes menores de 25 años desciende en el mes de diciembre en 12.014 personas (-5,83%) respecto al mes anterior y es el menor de la serie histórica con un total de 193.965.

El desempleo baja en 14 comunidades autónomas. Aumenta en Cataluña (3.474), Comunidad Valenciana (885) y apenas varía en La Rioja (160). En términos interanuales, el paro baja especialmente en Baleares, Aragón y Galicia.

Contratos

El número total de contratos registrados durante el mes de diciembre ha sido de 1.116.153. De este total, 414.562 contratos de trabajo son de carácter indefinido representando el 37,14% de todos los contratos.

En 2023 se ha consolidado la contratación indefinida ya que se han firmado 6.620.983 nuevos contratos estables en el marco de la reforma laboral.

Se han beneficiado, especialmente, los jóvenes: un 42,6% de los contratos que firman son indefinidos, un porcentaje que multiplica por 6 veces la media de 2006 a 2021.

Los sectores en los que más favorecida se ha visto la estabilidad en estos dos años de reforma laboral han sido la Agricultura y la Construcción. Este año el 72% de los contratos registrados en la Construcción han sido indefinidos y el 52% en el caso de la Agricultura.

Además, en 2023 se han firmado el menor número de contratos temporales de la serie: 8.823.222. Suponen un 21,8% menos que en el año anterior y en torno a la mitad de los que se firmaban anualmente en el periodo 2015-2019.

Prestaciones por desempleo en noviembre

Los beneficiarios y beneficiarias a final del mes de noviembre de 2023 eran un total de 1.824.163. La tasa de cobertura en noviembre ha sido del 71,1%. Los gastos totales de noviembre de 2023 ascendieron a 1.904,05 millones de euros. El sistema de protección al desempleo presenta un superávit de 5.502 millones€, mejorando la protección y gracias al impulso del empleo.

UGT destaca el impacto de la reforma laboral

UGT destaca que la reforma laboral, tras dos años de vigencia, ha consolidado el empleo estable, frente al temporal, pero insta a seguir mejorando el mercado de trabajo, actuando contra el subempleo (medido a través de los contratos parciales involuntarios) y reforzando las políticas activas de empleo, en especial las destinadas a la orientación profesional.

«Además, con este diciembre se cierra también otro año de aplicación de la reforma laboral de 2021. Después de dos años desde que entrara en vigor, se puede observar con más claridad que los avances conseguidos en materia de calidad y estabilidad del empleo no eran algo puntual, producto de las primeras adaptaciones de las empresas a la nueva normativa, si no que se están volviendo estructurales, manteniéndose en el tiempo. La tasa de temporalidad de la afiliación es el mejor ejemplo de ello, en tanto que, tras dos años, continúa en mínimos del 14%, mientras que antes de la reforma se situaba alrededor del 30%. Aún más relevante es la reducción de la temporalidad entre los jóvenes menores de 30 años, que se mantiene en el 22%, ascendiendo antes de la reforma al 53%», señalan en el sindicato.

En materia de contratación, la estadística también se está estabilizando en torno a una contratación más estable y de mayor calidad, materializada en un mayor peso del contrato indefinido en la estructura contractual. Así, en este diciembre se han firmado 1.116.153 contratos, 73.764 menos que el mismo mes del año anterior y 565.397 menos que en diciembre de 2021, antes de la reforma. De los firmados este mes, 414.562 son indefinidos, lo que supone el 37,1% de la contratación. Una cifra que antes de la reforma apenas alcanzaba el 10% de los contratos. Entre ellos, destaca el indefinido a tiempo completo, el más estable, que supone el 40,6% del total de indefinidos. «Por tanto, ahora se firman menos contratos que antes de la reforma, pero más estables y de mejor calidad, en tanto que se ha puesto trabas al encadenamiento de contratos temporales de muy corta duración, dando paso al contrato indefinido como contrato de referencia del mercado de trabajo», subrayan en UGT.

Para UGT, esta reforma ha demostrado que una mejora de las condiciones en las que se desenvuelven los puestos de trabajo y de la estabilidad del mercado laboral, además de suponer más calidad de vida para las personas trabajadoras, también se traduce en una mayor fortaleza y una mayor capacidad de la economía para hacer frente a posibles adversidades. Algo que supone un incentivo para continuar ahondado y corrigiendo las deficiencias que aún persisten en el mercado de trabajo, sobre todo ahora que algunos organismos, como la OCDE, han rebajado las perspectivas de crecimiento de la economía española para el próximo año.

Una de las principales deficiencias a corregir es la del subempleo, medido a través de la parcialidad involuntaria, que asciende al 47,9%. Esto quiere decir que hay una buena parte de la población trabajadora que está empleada a tiempo parcial únicamente porque no encuentra un trabajo a tiempo completo. Algo que se traduce en un sueldo inferior, que en la mayoría de casos se sitúa por debajo del Salario Mínimo Interprofesional y que es una de las principales razones para que en España continúe habiendo un 11,6% de personas trabajadoras en riesgo de pobreza, lo que se conoce como pobreza laboral (ingresos por debajo del 60% de la mediana).

Para UGT, es inadmisible que existan personas que se encuentren en situación de pobreza incluso disponiendo de un puesto de trabajo. Es fundamental mejorar las condiciones laborales en todos los empleos, elevar los incrementos salariales para recuperar el poder adquisitivo perdido en los últimos años y reformar los sistemas de protección social para apoyar los ingresos de las familias más vulnerables. A su vez, hay que tener en cuenta la situación de las personas en desempleo, especialmente aquellas de más larga duración, que son las que tienen más posibilidad de caer en una situación de exclusión social. Para ello, es necesario revisar en profundidad las actuales políticas activas de empleo y mejorar los recursos disponibles por los Servicios Públicos de Empleo, especialmente aquellos destinados a la orientación profesional, pues es un elemento imprescindible para que las personas salgan lo más rápido posible del desempleo, recibiendo una atención individualizada que les provea del mejor conjunto de servicios posible en cada situación.

USO habla de desaceleración en la reducción del paro

Diciembre termina con un descenso del paro de 27.375 personas. “16.352 menos que hace un año, un 37,3% menos, lo que pone de manifiesto que estamos ante unos datos no muy favorables para un mes de diciembre. Esta tibia reducción del desempleo es también la tónica general de este 2023, con el paro cayendo tímidamente en 130.000 parados menos, y evidenciando el mal crónico de nuestro mercado de trabajo: la temporalidad disfrazada y la parcialidad involuntaria”, considera Joaquín Pérez, secretario general de USO.

Esta desaceleración en la reducción del paro a lo largo de 2023 también se constata al analizar el número de contratos. El frenazo en la contratación se manifiesta muy especialmente en la contratación indefinida que sufre una caída de un 26,30 % con respecto al mes anterior y del 10,68 % en variación interanualLos contratos temporales en diciembre supusieron el 63 % de los firmados en diciembre.

“Un 6,20 % menos de contratos firmados con respecto a diciembre de 2022, y en todo el año, 15,5 millones de contratos, 2,8 millones menos, o lo que es lo mismo, un 15,65 % menos. El mercado laboral se ha estancado, y es el momento de reconsiderar la legislación laboral y dejar de celebrar números mediocres, empezando por llamar precario a lo que algunos llaman contratación fija, porque es evidente que no lo es. De continuar con este modelo laboral, los más de 5.000 millones de euros de superávit que presenta el sistema de protección al desempleo harán buena falta para sostener el aumento de parados”, recalca el secretario general de USO.

La reducción del desempleo femenino y juvenil es un buen dato a destacar de la estadística de empleo del mes de diciembre. El paro femenino ha descendido en 28.120 (-1,71%), mientras que el juvenil se redujo en 12.014 personas (-5,83%), a pesar de seguir liderando el ranking europeo en este sentido.

“Aunque la reducción del desempleo en estos dos colectivos se puede relacionar con el aumento de los contratos temporales en hostelería y comercio en la campaña de Navidad, esperamos que 2024 continúe con esta tendencia”, pide Pérez.

Adecco espera una subida del paro en enero

«Comenzaremos el 2024 con 20,59 millones de personas ocupadas y un paro que alcanzaría los 2,78 millones», destaca Javier Blasco, director de The Adecco Group Institute. Pese a la progresiva desaceleración de la economía, el crecimiento interanual del número de afiliados mantiene su ritmo con variaciones mínimas desde hace siete meses; en diciembre un +2,7% interanual y +0,1% mensual. Ahora hay 20.836.010 personas afiliadas, el mayor número para un mes de diciembre de la serie histórica, con 539.700 nuevos empleos en los últimos 12 meses.

Los Servicios encabezaron el aumento del empleo (+3,2%), aventajando a la Construcción (+2,8%). En cambio, el sector agropecuario perdió empleo por 29º mes consecutivo.

El desempleo ha bajado hasta las 2.707.456 personas, lo que supone una caída interanual del 4,6%, la más moderada desde mayo de 202, y encadena 32 meses seguidos bajando. Ahora hay 2,71 millones de parados registrados, a los que pueden sumarse 508.500 con “disponibilidad limitada” y otras situaciones (+5,2% interanual). Si también se suman las personas en ERTE (10.900 personas) y los fijos discontinuos que no trabajan, la definición más amplia de paro llegaría a unos 3,7 millones de personas (+0,5%).

En cuanto a las previsiones, en enero la afiliación tiende a caer y el paro registrado a subir. El empleo alcanzaría a 20,59 millones de ocupados (+2,5% interanual) y el paro registrado alcanzaría a 2,78 millones de personas (-4,6% interanual).

«Un cierre de 2023 en el que la previsión es que se alcance un incremento del PIB del 2,4%, una buena cifra si comparamos con la economía mundial que va a crecer un 2,9% y que la de la Unión Europea va a crecer solo un 0,6%», añade.

«En este entorno de desaceleración económica que coincide además con tipos de interés que seguirán tensionados, la situación de la guerra de Ucrania y de Oriente Próximo, efectos de la espiral inflacionista, y en un entorno donde Alemania sigue castigada y parece que China ralentiza su economía hay tres motivos para la desaceleración económica: los tipos de interés, las restricciones a la política presupuestaria tras las nuevas normas fiscales de la UE, y los riesgos derivados del cambio climático», avisa.

Infojobs: La contratación indefinida toca techo

«Se cierra un año en el que se ha alcanzado el máximo histórico de personas afiliadas a la Seguridad Social y en el que tanto el paro registrado como la afiliación han seguido una tendencia similar: en ambos casos han ido mejorando los registros en comparación con 2022, aunque la variación interanual se ha ido moderando progresivamente», señalan en Infojobs.

Por lo que se refiere a las contrataciones, los datos publicados a lo largo de todo el año por el Ministerio de Trabajo reflejan que el impacto de la reforma laboral se ha mitigado. Así, el incremento de contrataciones de carácter indefinido que se produjo al inicio de 2022 con la entrada en vigor de este nuevo marco normativo, en los últimos meses se ha estabilizado.

Durante el pasado mes de diciembre, un 35 % de los contratos iniciales que se firmaron en nuestro país fueron de carácter indefinido (380.730 contratos). Esta cifra es algo más baja que la de los últimos meses. Por ejemplo, en noviembre fueron el 40 % y en octubre el 42 %.

Pese a que haya una ligera distancia entre los meses inmediatamente anteriores, el dato de diciembre refleja un salto importante en comparación con lo que era habitual antes de la reforma laboral. Por ejemplo, en el mismo mes de 2021 solamente un 6 % de los contratos iniciales que se firmaban eran indefinidos, frente al 35 % actual.

En este sentido, se aprecia claramente el cambio de tendencia que se produjo con esta nueva legislación, del mismo modo que se aprecia como, en el último año, se ha estabilizado el peso de los contratos indefinidos sobre el total de los contratos iniciales. Así, mientras que durante los primeros meses de 2022 esta representatividad del contrato fijo creció de manera contundente, poco a poco se ha ido estabilizando y en 2023 se ha movido siempre en torno al 40 %.

Pese a esto, se sigue apreciando el carácter estacional del mercado laboral español en el volumen de contrataciones iniciales indefinidas. Así, desde la entrada en vigor de la reforma laboral, se puede observar que, aunque el peso de los contratos fijos haya crecido en términos generales, tiende a contraerse durante los meses de verano y la campaña de navidad. En 2023, por ejemplo, julio (38 %), agosto (37 %) y diciembre (35 %) han estado por debajo del resto de meses del año, que se han movido entre el 40 % y el 44 %.

Esta misma tendencia también se aprecia al observar la afiliación a la Seguridad Social o la ocupación de la Encuesta de Población Activa (EPA) que elabora el INE de manera trimestral.

Con respecto a la afiliación, en diciembre, un 61 % de las personas afiliadas a la Seguridad Social (dato no desestacionalizado) contaban con un contrato indefinido. Esta cifra es similar a la de diciembre del pasado año (59 %), pero significativamente superior a la de al mismo mes de 2020 y 2021, cuando se situó en el 49 %, doce puntos porcentuales por debajo del dato actual.

Por lo que se refiere al volumen de ocupados con un contrato indefinido, los últimos datos disponibles de la EPA (INE), correspondientes al tercer trimestre de 2023, reflejan que en España un 71 % de las personas ocupadas tiene un contrato indefinido, frente al 63 % que se registró en el cuarto trimestre de 2020 y 2021.

¿Te ha parecido interesante?

(+2 puntos, 2 votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.