Abanca amplía su oferta comercial con la nueva Hipoteca Mari Carmen Mixta, que aúna en un solo producto las principales ventajas de un préstamo hipotecario fijo y uno variable.

La Hipoteca Mari Carmen Mixta ofrece un tipo de interés fijo durante los primeros cinco años del préstamo. De esta forma, desde que firma el préstamo, el cliente conoce la cuota fija que va a pagar durante las primeras 60 mensualidades. A partir del sexto año y durante el plazo restante, el tipo de interés de la hipoteca pasa a ser variable, sumando un margen al Euribor a 12 meses.

En caso de alcanzar la bonificación máxima por la contratación de productos o servicios básicos en el banco, el cliente podría obtener un tipo de interés fijo del 2,5% durante los primeros cinco años, y a partir del sexto año, del Euribor a 12 meses +0,6%.

La directora de Desarrollo de Negocio de Abanca, Saray Cendón, resalta que “con esta nueva alternativa de financiación queremos ofrecer a nuestros clientes las mejores condiciones de una hipoteca fija y de una variable en un contexto marcado por la escalada de los tipos de interés”. Y subraya que el producto “aporta al cliente tranquilidad y seguridad durante los primeros años de la hipoteca, que coinciden habitualmente con el período de mayor carga de intereses, y le permite beneficiarse de una posible bajada de tipos en un futuro, con unas de las tarifas más bajas del sector ahora mismo”.

La Hipoteca Mari Carmen Mixta está destinada a facilitar el acceso a la financiación para la compra, autopromoción o rehabilitación de viviendas. Puede solicitarse a un plazo máximo de 30 años y, al igual que el resto de modalidades Mari Carmen, permite financiar hasta el 80% del menor de los siguientes valores: el de tasación de la vivienda o el del precio de compraventa, y no repercute al cliente los gastos de notaría, registro y gestoría.

Con este nuevo producto, Abanca refuerza su amplio catálogo de préstamos hipotecarios. En su oferta destaca la Hipoteca Mari Carmen para viviendas eficientes, que bonifica el tipo de interés durante el primer año si el inmueble cuenta con una calificación energética A o B.