La Autoridad Bancaria Europea (EBA) publica, por primera vez, un conjunto de indicadores, cuyo objetivo es identificar el perjuicio para los consumidores derivado de la mala conducta de las instituciones financieras que ofrecen productos de banca minorista en la UE. Los indicadores muestran la experiencia de los consumidores con los servicios financieros y complementarán otras fuentes de información que la EBA ya utiliza para decidir sobre sus prioridades de protección al consumidor.

Estos indicadores cubren los productos bancarios en el ámbito de protección al consumidor de la EBA, e incluyen crédito hipotecario, crédito al consumo, depósitos, cuentas de pago y servicios de pago. Los indicadores están destinados a medir los riesgos minoristas que enfrentan los consumidores, el perjuicio potencial sufrido en el contexto de la relación comercial entre los consumidores y sus proveedores de productos/servicios.

Los indicadores proporcionan información que ayudará a la EBA y a las autoridades nacionales competentes a priorizar su trabajo de regulación y supervisión en el área de protección del consumidor, pero también puede ser de interés para otros.

Una nota metodológica complementa esta publicación para ayudar a interpretar los resultados. También describe advertencias importantes que deben tenerse en cuenta al analizar los datos. Con el tiempo, a medida que haya más datos disponibles y su calidad continúe mejorando, los indicadores mostrarán tendencias emergentes y se incorporarán al resto del trabajo de la EBA en el área de protección del consumidor.

El 1 de enero de 2020, la revisión del Reglamento de la EBA  amplió su mandato en relación con la protección del consumidor. De esta forma, el artículo 9 (1) del Reglamento EBA modificado requiere que la Autoridad Bancaria Europea realice una serie de tareas adicionales, incluido «desarrollar indicadores de riesgo minorista para la identificación oportuna de posibles causas de daño al consumidor».