Los organismos supervisores de Italia, Francia, España y Bélgica, bajo el paraguas de la Autoridad Europea de Valores Financieros (ESMA), son partidarios de ampliar el veto a las posiciones cortas que expira este viernes, según el diario italiano ‘Il Messaggero’.

Estos países comunicaron el pasado 11 de agosto la prohibición de esta operativa por un periodo de 15 días, que podría ampliarse. El plazo concluye este viernes, por lo que los organismos supervisores deberán comunicar en las próximas horas si amplían o derogan la medida.

En España, el veto afecta a los títulos de Banca Cívica, Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, Banco de Sabadell, Banco de Valencia, Banesto, Banco Pastor, Banco Popular, Banco Santander, Bankia, Bankinter, Caixabank, Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), Grupo Catalana de Occidente, Mapfre, Bolsas y Mercados Españoles (BME) y Renta 4 Servicios de Inversión.

Sólo en la banca mediana, las posiciones cortas registradas en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) alcanzan un valor superior a los 640 millones de euros. La media fue muy aplaudida desde diferentes sectores, como la patronal bancaria, pero los analistas siempre han mostrado dudas sobre su efectividad, ya que como explican, la prohibición no ha evitado la caída de las entidades financieras, y consideran que no debería prorrogarse porque no está consiguiendo el efecto deseado.

La mayoría de los expertos creen que el veto no evitará el castigo de los inversores a las entidades financieras, y destacan que lo que necesita el sector es generar certidumbre para recuperar la inversión.