El grupo asegurador, que en septiembre de 2008 recibió un rescate de 182.000 millones de dólares (129.347 millones de euros) por parte del Gobierno de EEUU para evitar su quiebra, precisó que sus cuentas reflejan el impacto de 4.500 millones de dólares (3.195 millones de euros) por las cargas relacionadas con su reestructuración.

En concreto, AIG detalló que de estas cargas extraordinarias 1.300 de dólares corresponden a la valoración diferida de impuestos, mientras 1.900 millones de dólares proceden de la venta pendiente de AGF y otros 1.300 millones de dólares corresponden a depreciaciones relacionadas con la venta de AIG Star Life Insurance.

De este modo, en los nueve primeros meses del ejercicio la aseguradora registró pérdidas por importe de 3.268 millones de dólares (2.319 millones de euros), lo que representa una mejora del 57,4% respecto al mismo periodo de 2009.