El Tesoro ha colocado cerca del máximo previsto (4.500 millones de euros), gracias a una demanda que se ha situado en 7.693,25 millones de euros.

Concretamente, el organismo emisor, que ya tenía previsto emitir papel a 10 años, pero en el caso de la operación a 30 años se trata de una emisión adicional, ha colocado 3.218,93 millones de euros en la subasta a 10 años, a un tipo de interés del 5,179%, ligeramente inferior al 5,220% ofrecido en la emisión anterior, realizada el pasado 17 de febrero.

Por su parte, en el bono a 30 años el Tesoro ha colocado 911,02 millones de euros, con una rentabilidad del 5,891%, también algo inferior al tipo de interés del 5,976% ofrecido el 17 de febrero en una subasta idéntica.

El éxito de la subasta de hoy se suma al conseguido en las emisiones anteriores, en las que el Tesoro ha logrado siempre cumplir con los objetivos en medio de una elevada demanda y a tipos generalmente más reducidos que el año pasado. De hecho, la prima de riesgo está en las últimas jornadas más o menos estable y se sitúa por debajo de los 210 puntos básicos.

En la emisión anterior, realizada este martes, el Tesoro también cumplió sus expectativas al colocar 5.500 millones de euros en letras a 12 y 18 meses y a tipos más reducidos que en la última subasta.