Gres Catalán, con sede en Calaf (Barcelona), ha presentado un concurso de acreedores voluntario, que ya ha sido aprobado, y ha planteado un plan de viabilidad y un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a un número aún sin determinar de trabajadores, pero no inferior a 30, según ha avanzado a Europa Press el presidente del comité de empresa, Miguel Ángel Cabañas.

Ha explicado que el ERE, que aún no se ha presentado oficialmente, afectará a los 33 trabajadores que ya estaban afectados por uno anterior –aprobado en octubre de 2010 pero que finalmente no se ejecutó– y a un grupo de empleados que la empresa aún no ha especificado.

La dirección de la compañía, que cuenta con una plantilla de 130 trabajadores, se ha reunido con el comité de empresa para informarles del concurso, pero no ha dado detalles sobre qué comportará el nuevo plan de viabilidad.

Según Cabañas, la intención de Gres Catalán es salvar la fábrica. «Quizá al final acabe cerrándose, pero la intención es seguir adelante, tanto de los trabajadores como del propietario», ha asegurado.

Fundada en 1911, Gres Catalán fabrica en sus centros de producción de Calaf tres líneas de productos: gres esmaltado, gres natural y ‘stonita’.