Anderson recordó a los trabajadores que este beneficio es «resultado directo» de su duro trabajo y dedicación, que ha permitido a Delta registrar unos beneficios de 1.400 millones de dólares (1.036 millones de euros) en 2010.

El responsable detalló a sus empleados que el abono no se realizará en una vez y en efectivo, sino que es parte de una compensación que incluye un competitivo paquete de pagos, beneficios y normas de trabajo junto con oportunidades adicionales para ganar más en cuanto la compañía mejore.

Tras salir de la bancarrota en 2007, los empleados de Delta han recibido 1.000 millones de dólares (740 millones de euros) en incentivos y en mejora de compensaciones y programas de remuneración.

Concretamente, el pago en 2007 ascendió a 158 millones de dólares (117 millones de euros). Por tercer año consecutivo, Delta ha aumentado la base de pagos para sus empleados cumpliendo la promesa de llevar los salarios de la aerolínea a los estándares de la industria a finales de 2010.

«Hoy, como reflejo directo de nuestro duro trabajo y del éxito de nuestra fusión, estamos compartiendo el mayor pago de beneficios de nuestra historia», destacó Anderson.

«Es un buen momento para Delta. Nuestro plan es trabajar y mientras nos rodeemos de buenos acuerdos de trabajo, nuestras oportunidades son tremendas. Con la dedicación y determinación de la gente de Delta, no tengo ninguna duda de que enfrentaremos con éxito los desafíos de 2011», concluyó el responsable.