Neuman y la mano de un maestro
-Stringfellow de Posies apoya a la banda murciana.
Como decía un conocido periodista, “no se habla en Madrid de otra cosa que de”… Neuman, Y es justo reconocer que estamos ante un grupazo que acaba de editar un gran disco y que cuenta con el apoyo de un maestro del power pop: Nada menos que Ken Stringfellow, lider de Posies y colaborador de REM, Minus Five y Chariot, entre otros.
Salvo el título –un poco ñoño eso de “Bye Fear/Hi Love”- y un desliz, el álbum es un portento de pop vitaminado, con grandes dosis de sosiego y distinción. Los coros, muy influidos por los de Posies etapa “Dear 23”; los arreglos; muy en línea con los del pop soleado de los sesenta y las composiciones, sensibles y originales, le hacen uno de los candidatos a mejor disco nacional del año.
Comienza con pildorazo directo al corazón y adicción inmediata. Llamada “Bye Fear/Hi Love” se ha convertido en himno en sus conciertos. Lo mismo que “Hell”. Además, van bien con tonadas como “A Part of Me”, y medios tiempos primorosos como “You Fill my Heart”. ¡Ah!, ¿el desliz?, “A Crab Kiss and Final Song” recuerda demasiado a ese pestiño de “Solo le pido a Dios” que Ana Belén y Springsteen han “inmortalizado”.
Sello: Subterfuge. Precio: 11. Discografía: “Plastic Heaven”, “Family Plot”, “Sonic Love” (con La Fábrica de la Luz). Influidos por: Posies, Nada Surf, Beatles.
Ty Segall, hasta dormido
-El de San Francisco vuelve a liarla.
Ty Segall no para. Es como si quisiera competir con Robert Pollard por el galardón de autor más prolífico y feraz del pop-rock . Y también por el de mejor, porque ambos están pletóricos. Ty Segall, por ejemplo, acaba de editar “Sleeper”, un disco donde muestra su faceta más acústica e intimista, sin olvidar la psicodelia, que ha sido siempre su estrella de Oriente. Pero, hasta casi dormido, vuelve a liarla
Ahora le da todo el protagonismo a la guitarra sin electricidad y a su voz somnolienta, cáustica y plagada de matices. Lo mismo hace canciones a la manera de una Incredible String Band con menos ácido del habitual que a la de un Marc Bolan desenchufado, un Roky Ericson calentón o un Dylan al que se le han subido los hongos.
Y, aunque con menos frecuencia que en sus anteriores obras, tampoco se olvida de esa tendencia innata al desparrame guitarrero y a continuarlo, a renglón seguido, con unos coros de lentitud y repetición hindú que tanto gustaban a uno de sus iconos: George Harrison.
Sello: Drag City. Precio: 16. Discografía esencial: “Twins”, “Slaughterhouse”, “Melted”. Influido por: Marc Bolan, Nikki Sudden, Mike Heron. Influye en: Jonathan Wilson, Israel Nash, Neuman.
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